El actor debutante Franklin Aro fue reconocido por su impresionante interpretación.
La película se presentó también en el prestigioso Festival de Cine de Tribeca.
Acompañado de parte de su elenco y sus productores, el director y guionista chileno Vinko Tomičić presentó su primer largometraje en solitario, El ladrón de perros, en el FICG, donde participó dentro de la programación de Largometraje Iberoamericano de Ficción, llevándose en dicha sección oficial una Mención Honorífica a Actor Revelación para Franklin Aro, protagonista de la historia que sigue a Martín, un lustrabotas que trabaja en las calles de La Paz, Bolivia, y vive con una vieja amiga de su difunta madre.
Movido por su imaginación, Martín comienza a sospechar que uno de sus mejores clientes podría ser su padre, se trata del señor Novoa, un sastre solitario cuyo único vínculo emocional es con su pastor alemán al que cuida como a un hijo. Desde su situación de orfandad, el chico está dispuesto a cualquier cosa con tal de encontrar a su padre, justo cuando el tiempo corre en su contra para concretar una adopción debido a su edad.
La cinta cuenta también con la participación del experimentado actor Alfredo Castro, quien este año recibió en Guadalajara el Mayahuel Iberoamericano por su trayectoria, junto a las actrices Teresa Ruiz desde México y Ninón Dávalos de Bolivia. Fue producida por los miembros de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMPAS: Academy of Motion Picture Arts and Sciences), Gabriela Maire y Edher Campos en una experiencia de co-producción entre distintos países; Bolivia, México, Chile, Ecuador, Francia e Italia, siendo Zafiro Cinema la compañía productora representante de México.
El director trabaja con la temática de la adopción, haciéndonos parte del mundo interior de su protagonista y retratando las repercusiones del vacío interior que siente mientras busca un padre. “Quise trabajar la orfandad, siempre me ha interesado retratar esos momentos claves que enfrentan algunas personas en el devenir natural de su proceso de constitución de identidad, relacionado directamente con sus relaciones filiales y paternales; por otra parte, el oficio de lustrabotas me parece que tiene un poder simbólico muy fuerte como imagen y acción en sí misma, mi primer interés con esto surge a partir de un recuerdo de la infancia que tengo de un joven lustrabotas que trabajaba en el barrio en el que crecí, intentando redescubrir ese universo me encuentro con los lustrabotas de La Paz”, compartió el director Vinko Tomičić.
Por su parte, la productora Gabriela Maire expresó: “El Ladrón de Perros como coproducción nació en el Encuentro de Coproducción que organiza la sección de Industria del Festival de Guadalajara en 2018, donde sostuvimos un primer encuentro con Álvaro Manzano, productor boliviano de la película, y Vinko Tomičić; tres años después y con el primer corte, fue ganadora de varios premios de Guadalajara Construye del mismo festival, lo que nos permitió terminar y tener la dicha de estrenar para Latinoamérica en este Festival que tanto nos ha dado, lo cual es un honor y completa el camino de todas las oportunidades que nos ha brindado el FICG”.