Texto: Andrea Pallares

Fotografías: Andrea Pallares

La noche del sábado, el público de Ciudad de México fue testigo de un concierto lleno de música regional mexicana. En el escenario, Grupo Duelo brindó una actuación que duró cerca de tres horas, deslumbrando a su fiel audiencia con todos sus éxitos.

Desde el inicio, con la presentación audiovisual que Duelo presentó, el público se entregó por completo a las canciones que han marcado generaciones, como “Aventurero”, “No Vale la Pena”, y “Te Quiero Más”; el escenario se llenó de una energía vibrante, con miles de voces cantando al unísono. Cada tema fue una verdadera celebración, un viaje emocional que no dejó a nadie indiferente.

Lo que hizo aún más especial esta velada fue la participación de dos de los conductores de la estación de radio La K Buena, quienes subieron al escenario acompañados de tres parejas que, en un gesto romántico, decidieron dar el siguiente paso en sus relaciones. Frente a un público emocionado, los conductores ayudaron a cada uno de los enamorados a comprometerse, regalándoles un ramo de rosas y creando un momento cargado de sentimientos y sorpresas. Las parejas, visiblemente emocionadas, aceptaron dar el sí, en un ambiente de amor y complicidad que envolvió a todos los presentes.

Antes de la participación estelar de Grupo Duelo, el escenario fue invadido por el talento de El Poder del Norte, quienes lograron encender al público con su característico estilo. La agrupación originaria de Monterrey hizo gala de su gran repertorio, interpretando desde sus más conocidos covers hasta sus propios éxitos, lo que generó un ambiente de fiesta y baile, como si de un palenque se tratara. Canciones como “Soy El Mismo”, “A que le tiramos”, y “La Culebra” pusieron a bailar a todos, preparándolos para la llegada del plato fuerte de la noche.

Finalmente, la banda Duelo cerró con broche de oro su presentación con el tema “Puño de Diamantes”, haciendo vibrar a todos con su música norteña llena de sentimiento y fuerza. Fue una noche en la que la música, el amor y el despecho se unieron de la mejor manera.

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