Texto: Havok

¿Te imaginas pasar días atrapado dentro de un vehículo, sin comida ni agua, viendo el mundo exterior pero sin poder pedir ayuda? Con esa inquietante premisa, el director David Yarovesky nos presenta Encerrado (Locked), un thriller psicológico protagonizado por Bill Skarsgård y Anthony Hopkins.

La historia comienza cuando un ladrón (interpretado por Skarsgård) intenta robar una aparentemente inofensiva camioneta. Lo que desconoce es que ha caído en una trampa perfectamente diseñada: el vehículo está modificado para convertirse en una prisión móvil, de la que solo se puede salir si su misterioso dueño (Hopkins) lo permite. A partir de ese momento, el protagonista se enfrenta no solo al encierro físico, sino a un juego mental que lo empuja al límite.

Aunque el film podría haber profundizado más en el duelo actoral entre Skarsgård y Hopkins (dos figuras de gran peso actoral), Encerrado consigue mantener la tensión a lo largo de sus 95 minutos. La acción se desarrolla principalmente dentro del vehículo, lo que potencia la sensación de claustrofobia y refuerza el dilema moral que enfrenta el personaje principal: ¿es posible redimirse cuando no hay salida?

La película juega con temas como el castigo, el arrepentimiento y la justicia desde una perspectiva inquietante, aunque en algunos momentos se siente que el guion no termina de explotar todo lo que promete. Aun así, es una experiencia intrigante.

Encerrado se estrena en cines este 8 de mayo, y sin duda dará de qué hablar entre los fanáticos del suspenso psicológico y thrillers.