Texto: Alejandro Vallejo
Fotografías: OCESA / Santiago Covarrubias
El Palacio de los Deportes se convirtió en el epicentro del techno, con la electrizante presentación del DJ y productor alemán Boris Brejcha. Desde el primer momento en que comenzó su set, el recinto se inundó de energía y los asistentes no tardaron en rendirse ante su inconfundible estilo.
Conocido por su distintiva mezcla de techno y minimal, Brejcha ofreció una exhibición de destreza técnica al combinar pistas emblemáticas con nuevos lanzamientos. A cada beat le acompañaba una impresionante producción visual: luces hipnotizantes y proyecciones que transformaron el lugar en una experiencia inmersiva para todos los sentidos.
Los asistentes, que llenaron el recinto a su máxima capacidad, respondieron con vítores y frenéticos movimientos de baile, creando una atmósfera de euforia colectiva que se mantuvo durante toda la noche.
Uno de los momentos más memorables fue la interpretación de su tema “Gravity”, que hizo vibrar cada rincón del Palacio. El sonido envolvente, potenciado por la energía del público, llevó la experiencia a un nivel casi catártico. Brejcha, fiel a su estilo con su característica máscara, conectó profundamente con los asistentes, logrando que cada uno se sintiera parte de un auténtico ritual sonoro.
Más allá de ser un deleite para los fanáticos del techno, la noche fue una clara muestra del talento y originalidad del artista alemán. Su capacidad para fusionar ritmos y crear una narrativa musical cautivadora quedó más que evidente, dejando al público con ganas de más.
La presentación de Boris Brejcha en el Palacio de los Deportes fue, sin duda, una experiencia inolvidable que reafirmó su lugar entre los grandes exponentes del género. Los ecos de su música aún resuenan en la mente de quienes asistieron a esta noche mágica, que seguramente será recordada por mucho tiempo. ¡Esperamos su pronto regreso!
